PASIVO



El pasivo puede definirse como el grupo de obligaciones jurídicas por las cuales el deudor  se obliga con el acreedor a pagar con bienes, dinero o servicios. 

Comprende obligaciones presentes que provengan de operaciones o transacciones pasadas.
Desde el punto de vista de su presentación en el balance, el pasivo debe dividirse en
circulante ó flotante y no circulante o consolidado. Lo que los distingue es el tiempo en que deben de ser cubiertos. Si la liquidación se produce dentro de un año o en el ciclo normal de operaciones de corto plazo, se considera circulante; si es mayor de ese plazo, se considera no circulante o consolidado.


Esta clasificación tiene importancia para apreciar la relación con los activos circulantes y no circulantes y, por consiguiente, la capacidad de pago de la empresa.